La perfecta Voluntad de Dios

 Muchas veces he escuchado decir, porque no me salen  las cosas como quiero, lo he planificado mucho para que ahora simplemente no se de nada...

Pero no se trata de que salgan las cosas como queremos, se trata de de que Dios esté en el asunto, para que todo lo que hayamos planificado sea de Bendición, ya que todo lo que acontezca en nuestras vidas es por la voluntad de Él.

Galatas 2
20 Con Cristo estoy juntamente crucificado, y ya no vivo yo, mas vive Cristo en mí; y lo que ahora vivo en la carne, lo vivo en la fe del Hijo de Dios, el cual me amó y se entregó a sí mismo por mí.

Hay momentos que sabiendo todo esto, nos sentimos desorientados, preocupados, y tristes, por la situación adversa que estamos atravesando. Pero no hay que olvidar nuestra naturaleza humana, que fallamos, pecamos, y nos arrepentimos. 

Gracias a Dios que nos ama tanto que nos ha dado el privilegio de presentarnos ante su presencia y poder reconocer que le hemos fallado. Su Espíritu Santo redargullendo en nuestro corazón, dando una palabra de aliento a nuestro Espíritu fortaleciendo nuestra alma y cuerpo, renovando nuestras fuerzas y poder decir...

Que se haga tu voluntad y no la mía Señor, porque en tu voluntad hay Bendición que sobra y abunda.

 

Ese sentimiento de paz, gozo, y tranquilidad, es sublime. Indescriptible para los que lo hemos sentido, es como estar flotando y olvidarse de todo lo que acontece en nuestra vida... 

Luego de ese éxtasis veremos las cosas desde una perspectiva diferente, sentiremos más confianza, en la espera de la voluntad del Señor. 

Ya no habrá ansiedad, sino, solo confianza de que en cualquier momento todo cambiará a favor nuestro.

Cierta ocasión estaba pasando por momentos muy desesperantes, no sabía que hacer, pensaba hacer esto y aquello y nada me salía bien. Quería resolver esa situación rápido porque ya era insostenible!!!

Deber 4 meses de renta en una ciudad extraña dónde no tienes familiares, ni amigos, sino, solo conocidos, los cuales también tenían sus problemas como yo.

El dueño de casa cobrando su dinero, la situación económica devastada por el COVID!!! 

De dónde Señor le cancelamos, decía yo orando y llorando. Impotente ante tal situación, llegó un momento en que el dueño de casa llamó a mi esposo y le dijo.

No me importa lo que haga yo quiero que me cancele lo que me debe, o si no se me van de mi casa, mi esposo le dice pero no sea así a dónde nos vamos a ir no tenemos dónde ir ni dinero para pagarle a usted, mucho menos para alquilar otro lugar!!! No me importa donde se vallan así sea a vivir en el contenedor de basura pero se me van. Yo escuchando aquellas palabras tan duras y sin corazón, solté el llanto me tire al suelo y me puse a clamar a Dios. Y le pedí que hiciera algo con esta situación, que usará a alguien como instrumento para ayudarnos a salir victoriosos. 

Mi dolor era tan fuerte, que sentía que moría, no podía respirar y me ahogaba, quería gritar, salir corriendo y no saber nada, pero mi esposo trataba de estar tranquilo ante la situación que estábamos pasando y me dijo. Confía en Dios que el algo hará para que salgamos por la puerta y no a escondidas cómo supone este señor (el dueño de la casa). 

Lo mire y le dije vamos orando, yo sabía que después de la oración el Señor me daría tranquilidad en mi corazón y paz en mi espíritu. Y así fué, no solo me dió tranquilidad y paz sino que nos dió la Victoria a través de una amiga de la infancia y que vive muy lejos (EEUU). 

Fue un milagro económico que ni en las películas se ha visto, mientras conversaba con mi esposo sobre lo que había acontecido minutos atrás, recibo la llamada de ella, preguntándome cómo estaba pasando en esos momentos de cuarentena, yo, solté el llanto y le conté lo que había acontecido minutos atrás.

Ella trato de calmarme, diciendome tranquila cuéntame con detalle que pasó... Le conté y me dijo inmediatamente te llamo en 5 minutos  y tranquila que yo te voy ayudar. 

Mientras tanto yo daba gracias a Dios por la ayuda, me devolvió la llamada y me dijo dame tu número de cédula, tus dos nombres y apellidos porque ahorita mismo te hago una transferencia y puedas solucionar este problema. Ella con su novio y un amigo habían reunido el dinero que yo necesitaba.

Wao!!!

Yo en 4 meses no pude resolver este problema, pero mi Señor lo hizo en minutos.

Isaías 54

7 Por un breve momento te abandoné, pero te recogeré con grandes misericordias.
8 Con un poco de ira escondí mi rostro de ti por un momento; pero con misericordia eterna tendré compasión de ti, dijo Jehová tu Redentor.

Aunque es difícil que nuestra Fe actúe cuando pasamos por momentos tan difíciles, pero!!!

Debemos entender que podemos fallar, pero en los peores momentos, siempre tenemos que tener nuestros oídos espirituales abiertos y nuestro corazón dispuesto a escuchar la voluntad de Dios.

Para que nuestra Fe actúe y obtengamos la Victoria deseada.

Es un consejo que tu lo tomas o lo dejas pasar, pues tenemos libre albedrío.

2da de Corintios 13

14 La gracia del Señor Jesucristo, el amor de Dios, y la comunión del Espíritu Santo sean con todos vosotros.

Amén